Autobombo y publicidad

Comentaba un amigo informático ayer que en poco más de un mes había pasado de analfabeto funcional en la Red a dominar parte (mínima, apunte yo) de la terminología internáutica. Y todo a raíz de la apertura de esta bitácora. Aunque el afán de superación se centra en los contenidos, que con el tiempo espero que recojan versiones más diversas de la noche madrileña, no he podido caer en un cierta dependencia bloguera. Un fenómeno que, por lo que he leído, le ocurre a muchos, y sobre todo al principio. Todo un chute de widgets, etiquetas, enlaces, links y demás jerga que te roba muchos minutos y te da un gran placer de libertad expresiva.

Y también algunos momentos jocosos, como la herramienta del que te permite conocer qué escribían en google o páginas de búsqueda los que, de alguna u otra manera, acabaron pinchando tu página. Es curioso que muchos busquen fiestas del novato en diversos colegios mayores, botellones en el templo de Debod, raves en la región o el precio reservado de la discoteca Cats. Mayor sorpresa causa que otros de los atrapados por Madrid no Duerme venían buscando «las hijas de ZP duermen en ataúdes» o «los EMOS se cortan las venas». Más surrealista es el hecho de que haya gente que intente localizar «monos, pijamas, tiendas en Madrid», «comercios de luces» o «humilladero 13 vino susana» y hayan acabado aquí.

Otra de las posibilidades de la página son las estadísticas, que cifran en casi 2.200 visitas en poco más de un mes. Agradezco a los conocidos y al resto de los amantes de la noche madrileña su interés. Lógicamente, hay unos post más vistos que otros. A la cabeza, el Oktoberfest castizo, la entrada dedicada a los garitos donde irían las hijas de ZP o lo que revelaban las cejas de Gallardón tras perder la candidatura olímpicas. Otras son menos concurridas, como la dedicada a las raves, la de la plaza de los cubos o el bar donde te dan un condón por copa.

Después de las propuestas y sugerencias recibidas, son los lectores los que tienen que elegir qué temas les gustaría encontrar próximamente:[

Entre las últimas novedades, he incorporado el patrocinio del huerto Molino Alto. Se trata de una vasta finca cordobesa dedicada a la plantación de una gran variedad de frutas y verduras, recolectados pocas horas antes de hacer el pedido y enviadas a cualquier domicilio en menos de 24 horas. He tenido la ocasión de conocer el lugar e impresiona su extensión y la cantidad de árboles y plantaciones, con unos frutos sanos y brillantes a simple vista. Pero no sólo es apariencia porque luego los pruebas y no te decepcionan.

En medio del valle del Guadalquivir también hay lugar para el divertimento. La balsa de agua instalada, que garantiza el riego ecológico de la finca, sirve en verano de pista para la práctica de canoas y kayak. Y cada mes de mayo, cuando empieza el buen tiempo y coincidiendo con las fiestas y ferias de Córdoba, el Molino Alto acoge la celebración del perol, una reunión familiar donde los productos de esta huerta y las cárnicos más sabrosos, preparados con mimo y sabiduría popular, acaban en los mejores salmorejos y flamenquines posibles.